sábado, 4 de agosto de 2012

Cine - Batman, The Dark Knight Rises


Wao! Es la mejor película de la saga de Batman que he visto pero sin restarle mérito a las otras entregas que he visto. Debemos aceptar y reconfirmar que Anne Hathaway es por calle la "gatúvela" mas sexy y elegante de todas, sin menospreciar a la bella y perfecta Michelle  Pfeiffer de Batman Returns (Tim Burton - 1992).

Volviendo al film en mención, hice varias peticiones de ir al cine, pero no fue hasta esta semana que pude ver a Christian Bale en uno de sus mejores desempeños como actor, amen de que lo sigo desde el Imperio del Sol (Spielberg -1987). Bale, tal como menciono, da vida a un Batman retirado, aislado del mundo real por sus cicatrices de batalla y amor, tras  el perder a su prometida y sentirse culpable por una muerte asumida. Batman necesita poder volver a confiar en si mismo y en sus instintos, volver a tener el valor de luchar contra un enemigo digno – Bane - y necesita por sobre todo volver a sentirse útil y que Ciudad Gótica lo necesita.

Este film tiene muchas críticas sociales subliminales: protegidos, huérfanos, mercenarios, arrepentidos y condenados, en los cuales no voy a entrar el detalle para que saquen sus propias conclusiones al ver la película. Cuando estaba en el cine, debo aceptar que me sentí un momento viendo Australia (Baz Luhrmann - 2008), puesto que la película seguía y seguía aun habiendo pasado desenlaces, a diferencia que en Batman: The Dark Knight Rises, todo esta conectado y no hay espacio a la interpretación del acto. Todos los personajes están relacionados entre si y actúan a acción, reacción. 

Hablando de enemigos dignos, Tom Hardy,  arrancando suspiros y con su sexy acento, aun de malvado, da vida al personaje de Bane, un terrorista emergido del mal, hijo de un mercenario, fruto de un amor prohibido, quien está enfocado en acabar con Ciudad Gótica como se conoce y sumergirla en el caos y miedo. Bane es un torturador, pero no físico, sino mental, en condiciones de que no se teme a la muerte sino a la no continuidad del espíritu.

Al final de la entrega se deja ver, a un ya crecidito, Joseph Gordon-Levitt, como futuro Batman para nuevas entregas, tras ser un policía ejemplar tras vivir una infancia difícil y en riesgo, pero bien lograda gracias a la fundación Wayne.

No podría terminar esta nota sin darle el debido merito al desenlace, donde se cumple el sueño de toda la vida de Albert: el ver feliz y en continuidad a su amo. Ya no les contaré más, vayan a su sala preferida y disfruten de la película, que dura 3 horas así que lleven provisiones.

Besos,

MV507

1 comentario:

  1. no la he visto pero he escuchado que es de esas pelis que o te gusta mucho o te parece un desastre... buen blog

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